Viernes, 03 de Julio de 2009
Pasa media hora y el gas se disipa, los manifestantes van llegando, y nuevamente se toman el puente Guacerique, que se encuentra en el lado sur este del parque, otro grupo se forma en el lado norte, por cada minuto que pasa son centenares los que llegan. A eso de las 10 inicia la marcha recorriendo la Calle Real hacia el Congreso Nacional, nuevamente los campesinos, los maestros, los obreros, los empleados públicos, enfermeras, estudiantes, vendedores y universitarios corean las consignas en contra del gobierno golpista y a favor del presidente depuesto. Al subir la calle del Congreso Nacional esta se encuentra acordonada en el lado sur, no hay pasada por ahí. La marcha sigue su paso hacia el Parque Central, arriba en los bajos del Congreso, toda la orilla que colinda con la calle se encuentra se encuentra también acordonada, los manifestantes ven hacia arriba saltando con el brazo levantado y el puño cerrado, la consigna se repite una otra vez; ¡Quereeeeeeeemos a Mel! ¡Quereeeeeeeemos a Mel! ¡Quereeeeeeeemos a Mel! Luego cambian la consigna y repiten la otra; ¡fueeeeeeera golpistas! ¡fueeeeeeera golpistas!, lo gritan saltando una y otra vez, lo hacen al ritmo de los timbales de los garífunas, al ritmo de punta. Es curioso ver los militares y los policías en el palco con sus cuerpos rígidos, sus toletes levantados y sus escudos enfrente, pero hay algo en sus rostros, hay algo que lo tratan de disimular pero es evidente; ¡una sonrisa de aprobación! Se nota que quieren tirar sus armas y lanzarse también con su pueblo a exigir la libertad y la democracia que nos fue arrebatada el domingo 28 de Junio en la madrugada por la oligarquía criolla aliada con el ejército, los medios informativos nacionales casi en su totalidad, los diputados del Congreso Nacional de los cuatro partidos políticos (Nacional, Liberal, Democracia Cristiana y PIN-SD) exceptuando los de la UD, el Cardenal Óscar Andrés Rodríguez y el Pastor evangélico Evelio Reyes, la Corte Suprema, el Ministerio Público, el Tribunal Supremo Electoral y muchos más. Todos se confabularon y fraguaron el golpe de estado pero se olvidaron del actor principal: ¡El pueblo hondureño!
La participantes en la marcha era compuesta por gente voluntaria, no se les dio nada para que fueran ahí, ni siquiera se les daba agua a los participantes, el que tenía sed la compraba con su dinero, al llegar al Parque Central esta ya pasaba de las 20,000 personas, muy superior a todas las anteriores, pero sin duda alguna que esto no lo sacarían los noticieros nacionales, solo radio Globo sigue informando pero su señal es interrumpida a cada momento, los noticieros internacionales son los que acompañan a la misma, ahora son más corresponsales.
Un grupo de jóvenes hace pintas en las paredes de la esquina de Burguer King y de donde antes era banco UNO, se acercan diez policías con el objetivo de agarrarlos y estos salen corriendo, entonces la muchedumbre espontáneamente rodea a los policías, se les van acercando y gritándoles; ¡fueeeeeeera golpistas! ¡fueeeeeeera golpistas! ¡fueeeeeeera golpistas!, alguien se agarra a otra tres personas y forman una barrera alrededor de los policías, las intenciones de la multitud no son buenas, pero estos son prudentes y salen por el lado oeste de la calle del Parque Central, se reanuda la marcha hacia el edificio de la ONU, la gente sale a las aceras y se asoma por las ventanas de las oficinas, muchos apoyan y levantan el brazo.
Llegamos al edificio de las oficinas de la ONU y ya la marcha es multitudinaria, se dan los discursos y se canta el Himno Nacional, nadie se va, muchos se sientan en las aceras pero las mayorías siguen en pie. Se llega la una de la tarde y el carro donde se lleva el equipo de sonido manifiesta que la marcha se regresa para el Parque Central, la multitud avanza nuevamente y sigue cantando y gritando, las pintas y las consignas en contra de los golpistas siguen.
Se llega al Parque Central y se convoca para el siguiente día a las ocho de la mañana en la Universidad Pedagógica Nacional.
El cerco informativo y la represión a la población siguen
Los medios informativos siguen diciendo falacias de la realidad, siguen pretendiendo hacerle creer a la población hondureña y a los extranjeros que todos están con ellos, no muestran imágenes ni emiten criterios con todo lo que tenga que ver a favor de la restitución del gobierno de Manuel Zelaya Rosales, a veces canal 11 o radio Globo informan peros sus señales son interrumpidas, lo mismo hacen con la señal de cable que transmiten CNN. Pero insisten en decir que lo que hacen es correcto, siguen justificando el golpe de estado y dándole explicaciones leguleyas. La población en pro de la restauración del gobierno de Mel Zelaya utiliza los celulares y el internet para romper el cerco informativo, pero ya poco a poco la población se va dando cuenta de lo que es real.
La libre circulación también es violentada, ya se ha confirmado que muchos buses que se conducen con personas hacia la capital son detenidos y regresados, en uno de los días anteriores uno de los buses que venía de Olancho fue pasconeado a tiros y le puncharon las llantas. No dejan que pasen los buses cuando identifican que estos van a la capital a sumarse a la resistencia.
El día de hoy también recibimos la noticia que la movilización de San Pedro Sula fue brutalmente reprimida.
Iniciemos la Huelga General y llamemos a la Insurrección Nacional
Las dirigencias deben llamar a la huelga general para contrarrestar la represión fascista, a través de la movilización revolucionaria, la huelga general, apelando al “derecho a la insurrección” contemplado en la misma Constitución de Honduras. Los compatriotas debemos de seguir generando conciencia en la población para que se sumen a la lucha. No basta el apoyo internacional para alcanzar la victoria en este momento, además, entre más fuerte sea la resistencia y el movimiento popular, más rápido exigiremos una Asamblea Nacional Constituyente amplia, democrática obrero, campesina y popular, para el servicio de las clases más desprotegidas del país y no para beneficiar a las pocas familias que se han adueñado de Honduras.
Pasa media hora y el gas se disipa, los manifestantes van llegando, y nuevamente se toman el puente Guacerique, que se encuentra en el lado sur este del parque, otro grupo se forma en el lado norte, por cada minuto que pasa son centenares los que llegan. A eso de las 10 inicia la marcha recorriendo la Calle Real hacia el Congreso Nacional, nuevamente los campesinos, los maestros, los obreros, los empleados públicos, enfermeras, estudiantes, vendedores y universitarios corean las consignas en contra del gobierno golpista y a favor del presidente depuesto. Al subir la calle del Congreso Nacional esta se encuentra acordonada en el lado sur, no hay pasada por ahí. La marcha sigue su paso hacia el Parque Central, arriba en los bajos del Congreso, toda la orilla que colinda con la calle se encuentra se encuentra también acordonada, los manifestantes ven hacia arriba saltando con el brazo levantado y el puño cerrado, la consigna se repite una otra vez; ¡Quereeeeeeeemos a Mel! ¡Quereeeeeeeemos a Mel! ¡Quereeeeeeeemos a Mel! Luego cambian la consigna y repiten la otra; ¡fueeeeeeera golpistas! ¡fueeeeeeera golpistas!, lo gritan saltando una y otra vez, lo hacen al ritmo de los timbales de los garífunas, al ritmo de punta. Es curioso ver los militares y los policías en el palco con sus cuerpos rígidos, sus toletes levantados y sus escudos enfrente, pero hay algo en sus rostros, hay algo que lo tratan de disimular pero es evidente; ¡una sonrisa de aprobación! Se nota que quieren tirar sus armas y lanzarse también con su pueblo a exigir la libertad y la democracia que nos fue arrebatada el domingo 28 de Junio en la madrugada por la oligarquía criolla aliada con el ejército, los medios informativos nacionales casi en su totalidad, los diputados del Congreso Nacional de los cuatro partidos políticos (Nacional, Liberal, Democracia Cristiana y PIN-SD) exceptuando los de la UD, el Cardenal Óscar Andrés Rodríguez y el Pastor evangélico Evelio Reyes, la Corte Suprema, el Ministerio Público, el Tribunal Supremo Electoral y muchos más. Todos se confabularon y fraguaron el golpe de estado pero se olvidaron del actor principal: ¡El pueblo hondureño!
La participantes en la marcha era compuesta por gente voluntaria, no se les dio nada para que fueran ahí, ni siquiera se les daba agua a los participantes, el que tenía sed la compraba con su dinero, al llegar al Parque Central esta ya pasaba de las 20,000 personas, muy superior a todas las anteriores, pero sin duda alguna que esto no lo sacarían los noticieros nacionales, solo radio Globo sigue informando pero su señal es interrumpida a cada momento, los noticieros internacionales son los que acompañan a la misma, ahora son más corresponsales.
Un grupo de jóvenes hace pintas en las paredes de la esquina de Burguer King y de donde antes era banco UNO, se acercan diez policías con el objetivo de agarrarlos y estos salen corriendo, entonces la muchedumbre espontáneamente rodea a los policías, se les van acercando y gritándoles; ¡fueeeeeeera golpistas! ¡fueeeeeeera golpistas! ¡fueeeeeeera golpistas!, alguien se agarra a otra tres personas y forman una barrera alrededor de los policías, las intenciones de la multitud no son buenas, pero estos son prudentes y salen por el lado oeste de la calle del Parque Central, se reanuda la marcha hacia el edificio de la ONU, la gente sale a las aceras y se asoma por las ventanas de las oficinas, muchos apoyan y levantan el brazo.
Llegamos al edificio de las oficinas de la ONU y ya la marcha es multitudinaria, se dan los discursos y se canta el Himno Nacional, nadie se va, muchos se sientan en las aceras pero las mayorías siguen en pie. Se llega la una de la tarde y el carro donde se lleva el equipo de sonido manifiesta que la marcha se regresa para el Parque Central, la multitud avanza nuevamente y sigue cantando y gritando, las pintas y las consignas en contra de los golpistas siguen.
Se llega al Parque Central y se convoca para el siguiente día a las ocho de la mañana en la Universidad Pedagógica Nacional.
El cerco informativo y la represión a la población siguen
Los medios informativos siguen diciendo falacias de la realidad, siguen pretendiendo hacerle creer a la población hondureña y a los extranjeros que todos están con ellos, no muestran imágenes ni emiten criterios con todo lo que tenga que ver a favor de la restitución del gobierno de Manuel Zelaya Rosales, a veces canal 11 o radio Globo informan peros sus señales son interrumpidas, lo mismo hacen con la señal de cable que transmiten CNN. Pero insisten en decir que lo que hacen es correcto, siguen justificando el golpe de estado y dándole explicaciones leguleyas. La población en pro de la restauración del gobierno de Mel Zelaya utiliza los celulares y el internet para romper el cerco informativo, pero ya poco a poco la población se va dando cuenta de lo que es real.
La libre circulación también es violentada, ya se ha confirmado que muchos buses que se conducen con personas hacia la capital son detenidos y regresados, en uno de los días anteriores uno de los buses que venía de Olancho fue pasconeado a tiros y le puncharon las llantas. No dejan que pasen los buses cuando identifican que estos van a la capital a sumarse a la resistencia.
El día de hoy también recibimos la noticia que la movilización de San Pedro Sula fue brutalmente reprimida.
Iniciemos la Huelga General y llamemos a la Insurrección Nacional
Las dirigencias deben llamar a la huelga general para contrarrestar la represión fascista, a través de la movilización revolucionaria, la huelga general, apelando al “derecho a la insurrección” contemplado en la misma Constitución de Honduras. Los compatriotas debemos de seguir generando conciencia en la población para que se sumen a la lucha. No basta el apoyo internacional para alcanzar la victoria en este momento, además, entre más fuerte sea la resistencia y el movimiento popular, más rápido exigiremos una Asamblea Nacional Constituyente amplia, democrática obrero, campesina y popular, para el servicio de las clases más desprotegidas del país y no para beneficiar a las pocas familias que se han adueñado de Honduras.